Mi familia en Guadalajara

Como ya habíamos mencionado, las hermanas Beatriz Castillo y Soledad Utrera, trajeron a sus hijos a la iglesia cuando conocieron las cosas de Dios, en ese lapso se conocieron los jóvenes Manuel Cortes Castillo (hijo de la hermana Beatriz) y Margarita García Utrera (hija de la hermana Soledad o “Chole”), los cuales en común acuerdo y en apego a la doctrina, el 31 de Julio de 1955, se unieron en sagrado matrimonio, en la naciente iglesia de Córdoba Colonia Palo Solo, (hoy Buena Vista), lugar donde radicaron hasta el año de 1964.

Ante la noticia del descanso del Apóstol del Señor nuestro hermano Aarón Joaquín González, el matrimonio Cortes García, se trasladaron con sus tres hijos Héctor Manuel, Elba y Elsa, a la Ciudad de Guadalajara Jalisco, sin decir palabra ambos pensaron en no regresar a Córdoba sino  establecerse cerca de la familia del hermano Aarón, ya que en su convicción, consideraban que en ese lugar estarían mejor en lo espiritual y por ende en lo material, no solo ellos sino que también sus hijos, y dejando su trabajo y pertenencias entraron el 11 de Junio a la Hermosa Provincia, cargando a sus hijos vieron por última vez al que en vida fuera el Ungido del Señor.

En la primer oportunidad y sin saber porqué, se dirigió al hermano Samuel Joaquín, hijo del hermano Aarón, joven de 27 años pero que desde la niñez había conocido y tratado, tal vez pensó que esa confianza lo motivo para hablarle, además de verle con admiración pues ante la enfermedad y deceso de su padre, actuó como un joven sumiso, trabajador y responsable, generando en muchos admiración y respeto. Le expresó el deseo de radicar en Guadalajara, el hermano Samuel al instante dio el permiso y las indicaciones necesarias, demostrándole a él y a la iglesia que no estaban solos, seguían acompañados del Apóstol del Señor ahora nuestro hermano Samuel Joaquín Flores.

Durante dos meses estuvieron viviendo en casa de la hermana Sara Wilis, en esos días su hermana Cristina compro una casa en la Hermosa Provincia, donde vivieron unos años, a principios de los setenta compró una casa en la calle gaza, aunque cerca pero fuera de la colonia, fue en 1974 y ante la insistencia de su hermana que compró la casa en la calle Jordán numero 674 en la Colonia hermosa provincia, lugar donde les nacieron otros tres hijos; Benjamín, Irma Yolanda y Manuel.

En esos días el Apóstol del Señor el hermano Samuel Joaquín, tuvo la inspiración de construir una casa digna de la gloria de Dios, los hermanos Manuel y Benjamín Cortes, con sus conocimientos en la Electricidad estuvieron colaborando hasta el término de esa obra, que hoy se trasladó a la Colonia Bethel.

La casa ubicada en Jordán, durante varios años se prestó para hospedar hermanos, pero desde hace más de 20 años está siendo utilizada por el Ministerio de Salud de la iglesia, lugar donde le dan consulta a varios cientos de hermanos en las festividades de la iglesia y estando al pendiente la hermana Margarita García.

En fin, la familia Cortes García se ha extendido; existen seis hijos, quince nietos, y dos bisnietos, esparcidos en México, Estados Unidos y Centro América, con alegría expresamos que todos estamos en la iglesia, sirviendo y predicando que en la tierra hay salvación porque tenemos a un siervo de Dios.

Mi familia en la iglesia y el Éxodo Dio inicio

Corría el año de 1944, en el poblado conocido como Paraje Nuevo en el Estado de Veracruz, vivió Beatriz Castillo Olivares viuda de Benjamín Cortes. Recibió la visita de su hermano Rafael, el cual la invitó para que escuchara la predicación de unos hombres que se hacían llamar los hermanos y venían desde el otro extremo de México, es decir del Estado de Jalisco en la ciudad de Guadalajara.

Por simple curiosidad, visitó esa tarde a los mencionados en la cercana Ciudad de Córdoba colonia México, lugar donde ya había iglesia, en esa ocasión escuchó al Pastor Doctor José Julián Chávez Cuevas el cual disertaba su tema preferido referente a la Grandeza y Divinidad de Dios, a la hermana Beatriz le sorprendió la forma de su predicación, al grado de expresar que cuando ese predicador mencionaba a Dios, le salía esa expresión de muy adentro, del corazón, por lo que al regresar le dijo a su familia que se bautizarían en la iglesia denominada; Iglesia del Dios vivo columna y apoyo de la verdad La Luz del Mundo, siendo el hermano José Rosales quien la bautizó.

Su fe se afirmó, y creció al conocer a la hermana María Joaquín esposa del hermano Chávez e hija del Siervo de Dios, viendo en ella a una mujer celosa y acorde a los ideales de su padre, pero la obra perfecta se consumó al ver y recibir al Apóstol de Dios, nuestro hermano Aarón Joaquín González, el cual en una de sus múltiples visitas a Córdoba les habló a los hermanos su mensaje que invitaba a la oración, vivir en el Temor de Dios, y sobre todo que; no son dioses los que se hacen con las manos. Dejando desde ese momento la idolatría e impiedad y procurando vivir una vida acorde a las enseñanzas de Cristo.

Estando latente la promesa que le refirió el Apóstol Pedro al carcelero de filipos, la hermana Beatriz además de encontrar una nueva familia, la familia de la Fe, se alegró aun más al ver que todos sus hijos los cuales eran; Esperanza, Cristina, Luisa, Manuel y Benjamín, fueron bautizados en el nombre de Jesucristo. Y no podía faltar quien le dio la noticia su hermano Rafael el cual también creyó a la predicación de un Siervo de Dios.

Al ver que su esposo había tenido otros hijos por fuera, vio peligro que al crecer por querer quitarles a sus medios hermanos lo que tenían, optando por venderlo, darle a Dios lo que le correspondía y librar a sus hijos de un peligro mayor, dejándoles por mayor herencia las enseñanzas cristianas.

En el extremo sur de Veracruz, en el Municipio de Rodríguez Clara, vivía Soledad Utrera Vera con sus tres hijos; Margarita, Celia y Gustavo, en año 1950 su hermana llamada Ofelia, ya era de la iglesia, y le escribió una carta donde con pocas palabras le daba un gran mensaje que era “Ven porque en este lugar hemos encontrado la verdad”, sin pensarlo, tomó a sus tres hijos y se trasladó a la Ciudad de Córdoba, donde conoció y recibió la predicación del Siervo de Dios y al igual que la historia anterior sus tres hijos fueron bautizados y perseveran hasta el día de hoy en la iglesia La luz del mundo, años después de su bautismo su mamá Petra Vera Cruz, creyó al evangelio y se bautizó, durmiendo casi de cien años de edad en la iglesia.

La hermana “Chole”, como fue conocida por todos, siempre predicó con alegría; “Entré a la iglesia de 29 años y nunca me casé”, demostrando con eso que en la iglesia las hermanas solas son respetadas, se incorporó al coro de Guadalajara por casi treinta años, donde logró muchas bendiciones, como acompañar al Siervo de Dios, nuestro hermano Samuel Joaquín Flores, en diferentes presentaciones tanto en México como en el extranjero, y haciendo honor a su nombre y vocación permaneció sola, pero fiel a las enseñanzas de Cristo, durmiendo en el Señor  el 15 de septiembre del 2005, rodeada de sus hijos, nietos y hasta bisnietos en la Colonia Hermosa Provincia Guadalajara Jalisco.

Mi Abuelita Beatriz, durmió en 1975, de la misma forma encontró que ya en la iglesia no hay soledad, a sus casi 36 años siendo viuda conoció la verdad, sacó a sus hijos adelante y le permitió el Señor verlos en su pueblo, Mi abuelita “Chole” Soledad siendo de 29 años encontró la paz y felicidad en la iglesia, demostrándolo con su celo, celo de Dios, hasta el último día de su estancia entre nosotros.

Ambas mujeres se mantuvieron fieles, les vinieron luchas pero han triunfado, pobres en lo material pero ricas en la fe, sus convicciones permanecieron junto con el privilegio de haber creído y recibido la predicación de dos Siervos de Dios, Aarón Joaquín González, Samuel Joaquín Flores, Apóstoles en estos últimos tiempos, hoy sus hijos, nietos, bisnietos y hasta tataranietos, se han expandido en varias decenas, diversificándose los apellidos, Cortes, Utrera, García, Rodríguez, Montoya, Carrillo, Castañeda, Saucedo, Ortiz, etc..  No solo en México, sino también en el extranjero lo que comprende Estados Unidos y Centro América. Pero todos con la misma fe y convicción que hoy en día llegan hasta una séptima generación.

Amén.

MI TESTIMONIO

 

 

 

 

HERMOSA PROVINCIA

Me llamo Manuel Cortes García, Nací en Guadalajara Jalisco México, por bendición de Dios crecí en la iglesia La Luz del Mundo, Mis padres Manuel Cortes y Margarita García me ayudaron en lo espiritual y en mi juventud me integre al servicio de la predicación del evangelio.

 

 

El Apóstol de Jesucristo Samuel Joaquín Flores tuvo a bien enviarme a la obra del Señor, y con su bendición unirme en matrimonio con la hermana Telma Flores, Dios no ha regalado tres hijo; Nimrod, Emmanuel, y Thelma Ismary.

 

Mi Testimonio empieza así:

 

Estando como Obrero en la Iglesia de Pérez Zeledón Republica de Costa Rica C.A. en febrero de 2005 empecé a sentir un cansancio en mi cuerpo, un desanimo que me hizo sentir como si estuviera envejeciendo, se me dijo que podía ser una causa normal debido a los cambios de metabolismo por la alimentación distinta de los dos últimos países donde estuve Panamá y Costa Rica.

 

En el mes de Agosto, empecé a sentir una pequeña molestia en mi pierna izquierda, en septiembre vi a un ortopedista, el cual me dijo que era un desgarre y que con el tiempo se curaría, la molestia continuó, no de una forma dolorosa sino algo incomoda, no viendo mejoría consulte a un traumatólogo el cual me dijo que era una ruptura del músculo.

 

Acompañada de esa molestia, empecé a perder peso, y a tener temperaturas muy elevadas, en el lapso de un mes ya había perdido mas de diez kilos, y mi semblante cambió tomando un tono amarillento en la piel.

 

En el mes de diciembre fuimos a la iglesia de la Republica Panamá en la zona de Changuinola, para entregar unos regalos a los niños de escasos recursos que les enviaba el Apóstol Samuel Joaquín, los niños se alegraron mucho y yo al verlos contentos. Pero el problema  en mi cuerpo seguía y después de esa encomienda mi cuerpo ya no resistió y caí muy grave.

 

Al regresar a la iglesia en Costa Rica, estuve internado en tres hospitales ya en el último conocido como la Clínica Bíblica,  me encontraron un tumor de extrema malignidad en mi pierna izquierda el medico que me atendió viendo que tenia el nivel de hemoglobina de seis y la presión arterial variaba la alta en 60 y la baja en 40, es decir una situación muy grave solo me dijeron que “Lo mejor es que se vaya a su casa y pase el año nuevo con su familia” esta noticia la recibí el 27 de diciembre de 2005.

 

Salí del hospital, no con mucha confianza de los médicos, en cierta forma desahuciado ya que me dieron cita para quince días para ver que se podía hacer.

APOSTOL SAMUEL JOAQUIN FLORES

 http://sjf.com.mx/

 El día 30 de diciembre llegó el aviso de parte del Apóstol Samuel Joaquín, el cual ordenó que me trasladase a México de urgencia y que me tratara en el HOSPITAL SILOE, http://www.hospitalsiloe.com/

HOSPITAL SILOE

 

 

esa noticia me alegró y motivó más a trabajar en la obra y defenderlo como lo que es; un hombre que cuida a su pueblo con amor velando en todo tiempo, para esta fecha ya había perdido mas de veinte kilos, no podía caminar ni diez pasos sin sostenerme con ayuda, y mi cuerpo entraba en taquicardia constantemente.

 

 

 

AÑO NUEVO EN COSTA RICA

Fui a la iglesia en Pérez Zeledon, a pasar el año nuevo y a despedirme de la iglesia, no les dije que lo que tenia era cáncer, para no entristecerlos pues a la verdad yo mismo creía que era mi fin.

 

Ese día el Apóstol Samuel Joaquín Flores, ora por todo el pueblo, yo no pude estar en el Servicio Especial de Cantos ya que mi cuerpo no me sostenía, pero escuchando vía Internet esperé el momento cual ora por su pueblo el Siervo del Señor.

 

Al escuchar al Siervo de Dios pasé al altar y me arrodille con

 

 

una pregunta ¿Qué le boy a pedir a Dios? Por la familia, mi salud, mi necesidad, ese momento recapacité y entendí que al estar en la mente de un Siervo de Dios estamos en la mente de Cristo, por lo cual ese día mi petición fue: “Señor bendice a tu Elegido” , y con esa petición empecé el año 2006.

 

Terminando el servicio, me despedí de los hermanos diciéndoles que fui trasladado a México pero sin decirles lo del cáncer, y estando con ellos en el convivió que acostumbra la iglesia los días primero de cada año, los veía comer pero no me ofrecieron cena ya que llevaba varias semanas sin poder comer pues todo lo devolvía.

 

A los pocos minutos sentí que algo en mi interior empezaba a brotar nuevamente, era un gusto o algo inexplicable, empecé a sentir hambre, y pedí comida la cual pude comer sin problemas, siento que fue La Oración del Justo, y se cumplió esa promesa de “Benditos los que te bendijeren”. Fue la oración del Apóstol Samuel Joaquín Flores que me devolvió la vida.

 

A los dos días fuí al hospital para pedir mis papeles y trasladarme a México, los médicos al verme dijeron “Nos da la impresión que usted ya esta sano”. Por falta de lugares en el avión hice el viaje solo, pero antes les dije a mis hijos lo que tenia pero les encargue que nos uniéramos en oración y que fuera lo que Dios quiera.

 

El día seis de enero de 2006, me reporté con el Pastor en Turno en Guadalajara el hermano D.E. Moisés Gutiérrez el cual dijo que el Siervo de Dios ordenó fuera al HOSPITAL SILOE, obra del Apóstol Samuel Joaquín, me atendió el oncólogo Dr. Jaime Vázquez, al ver mis estudios me dijo “Manuel, lo mas probable es que te cortemos la pierna”, y es que el tumor en los estudios se veía muy extendido, preparo la cirugía el diez del mismo mes, entré al quirófano con miedo al medio día a cirugía pero ya prevenido de lo que pasaría.

DR. JAIME VAZQUEZ ONCOLOGO

 

 

 

 

Estando en el quirófano, antes de anestesiarme me hablo la doctora. diciéndome “No tenga miedo, dijo el Siervo de Dios que todo saldrá bien”, con esas palabras quedé inconciente por la anestesia.

 

Desperté a las cuatro horas aproximadamente rodeado de mi familia en la carne y en la fe, les vi un rostro de alegría, no preguntaba nada aunque no sentía las piernas por la anestesia pero espere a sentirlas nuevamente, en eso llegó el Dr. Que me intervino Jaime V. y recuerdo sus palabras “Manuel no entiendo que fue lo que pasó, en los estudios era un echo amputar la pierna pero no fue así, el tumor estaba encapsulado no toco otros órganos, no echo raíces, TODO SALIO BIEN POR GRACIA DE DIOS”.

LA OPERACION

 

 

 

 

El tumor pesó casi lo dos kilos media 30 centímetros de lago y

UNA PARTE DEL TUMOR

 

 

14 de ancho, fue resacado por completo, pero de malignidad extrema.

 

Era la obra de Dios, tal y como lo dijo, a los pocos días fui intervenido nuevamente ahora de la vesícula, me sentía muy inútil, pero el día 17 de enero me envió a decir en el hospital el Apóstol Samuel Joaquín, que me asignaba estar como ministro en la iglesia de Arroyo Hondo Zapopan, esa noticia me alegró mucho pues en ese momento me sentía muy inútil pero él me hizo sentir lo contrario.

IGLESIA ARROYO HONDO ZAPOPAN

 

 

 

 

El día 26 de enero me levanté junto con mi esposa e hijos a las cuatro de la mañana a saludarlo y agradecerle todo lo que había hecho por mí, además le dije que ya me iría a la iglesia que me había asignado, pero me dijo “No, sigue reposando solo te estoy enviando para que veas que aun me eres útil,” comprendí que se me brindaba una oportunidad, además me dijo que me cuidara para no tener una recaída.

 

Al igual que el Maestro hizo; escupió en tierra y con sus manos hizo lodo el cual lo untó en los ojos del ciego y luego lo envió lavarse al estanque del SILOE, me envió para que recibiera el tratamiento completo, es decir 25 radiaciones y 8 quimioterapias.

 

 

 

DOCTORA MEDRANO Y EQUIPO

Las quimioterapias, me las aplicaron en el HOSPITAL SILOE, y fue la Dra. María Medrano, la primera fue el 8 de febrero y ese mismo día iniciaron las radiaciones.

 

A la Dra. Medrano le sorprendió que mi hemoglobina fuera subiendo después de cada quimioterapia, es decir que de tenerla en diez, en la quinta quimioterapia subio a 15.7, recuerdo sus palabras las cuales fueron “Don Manuel, algunos compañeros me preguntan si en lugar de quimioterapias le estoy poniendo vitaminas, Sigan orando a quien ustedes le oran ya que Él esta contestando”, terminé el tratamiento el día 4 de julio, ya en agosto ayude en la repartición del pan y el vino en la Santa Cena.

 

 

 

EFECTOS DE LA QUIMIO

Salí del hospital en silla de ruedas, luego anduve con muletas y por ultimo con bastón, del cual se me dijo que nunca lo dejaría pues lo que habían cortado de mi pierna era una tercera parte, que no podría mantener el equilibrio pero que me alegrara por que en si lo mío era cortarme la pierna.

 

 

 

ORACION DE DOCE MEDIO DIA

El día tres de enero de 2007, el Apóstol Samuel Joaquín, salió a orar a las 12:00 del medio día, y al verme me pregunto que como seguía, le respondí que bien, después me dijo “Y el bastoncito cuando lo dejas ¿en un mes?”, yo para mi vergüenza lo dijo; me quede callado y el me volvió a decir “No te dijo que lo dejes, tu dime ¿En un mes lo dejas?”, reacciones y le respondí “Si Varón de Dios en un mes lo dejo”, el sonrío y me dijo “Eso quería oír”. Luego se despidió de todos los que estábamos regalándonos palabras de ánimo.

 

Los compañeros que escucharon esas palabras me dijeron “Ya sabes solo tienes un mes para dejar el bastón”, empecé a practicar en la Colonia Hermosa Provincia, primero caminaba con el bastón sin apoyarme, después le daba el bastón a mis hijos y así al mes, deje el bastón definitivamente.

MANUEL CORTES Y TELMA FLORES

 

 

 

 

La palabra del Apóstol Samuel Joaquín, infunde valor, confianza, y nos alienta a seguir. Su ejemplo, motiva para que en las adversidades salgamos adelante y su oración la cual es a diario, nos sostiene firmes en todo tiempo.

 

 

 

TEMPLO GUATEMALA

Actualmente estoy en la Republica de Guatemala, en la iglesia de la Capital, es un edificio que el Apóstol Samuel Joaquín, compró y donó a ese país, en ese Edificio se habilita Casa de Oración, Salón de niños, Oficinas Naciones y casa pastoral, la iglesia de Guatemala reconoce ese hermoso cuidado.

 

Hablar de lo que Apóstol Samuel Joaquín, ha hecho conmigo, mi familia y su pueblo solo puedo terminar diciendo.

 

“No se ha dicho ni aun la mitad”.

 

Dios bendiga a su santo Apóstol Samuel Joaquín, y le siga regalando triunfos, y lo fortalezca para nuestro bien.

Amen.

 

 MANUEL CORTES GARCIA.